Viaje a la Lenin
Hacía 2 años que no iba a la Lenin, y ayer fui. Una palabra puede describir el viaje, desastroso. Primero porque tuve que pasar por la CUJAE a buscar a Lisandra, segundo porque salir del puente de Calabazar fue extenuante y tercero porque de donde nos dejó el autobús hasta la entrada de la escuela hay mucho que caminar. Y por si fuera poco la salida fue no tan mala pero igual, muy cansante ya que tuvimos que caminar toda esa carretera de nuevo.
La escuela está casi totalmente cambiada, ahora tiene aire acondicionado en las habitaciones, agua todo el día y comida decente. Nada que ver con mis tiempos (que conste que son solo 5 años los que tengo de graduado) cuando teníamos que ir a bañarnos a veces al organopónico en la cisterna de las regaderas del huerto, pasar frío las noches de Diciembre y Enero debido a la escases o ausencia total de persianas en las ventanas, hacernos los de la vista gorda el día que de almuerzo había arroz, chicharos y la mitad de una toronja. Esos momentos son los que con más felicidad recuerdo de mi preuniversitario, creo que me enseñaron a valorar otras cosas por encima de las materiales. No es cinismo, hablo en serio cuando digo que prefiero la Lenin que yo pasé a esta que tienen ahora.
Otra cosa que me disgustó mucho es que mi antigua unidad es ahora una escuela de maestros. En cuanto cruce la línea del bloque central que divide la 2da de la 1ra unidad (yo estaba en esta última) enseguida cambió la manera de verse al estudiantado, cambió la manera de verse los uniformes, creo que hasta el aire cambió. De ese lado de la escuela se vive ahora como se vive en cualquier preuniversitario normal de La Habana. Todo es chusmería y malos tratos entre los estudiantes, los muchachas gritándose barrabasadas de un albergue a otro o en medio del pasillo central, los varones diciendo malas palabras como si las respiraran y faltándole el respeto a los profesores. ¿Dónde quedó mi vieja Lenin? Por suerte y alegría para mí pude comprobar que eso solo estaba pasando en la sección de la escuela que destinaron para la formadora de maestros. En lo que queda destinado a preuniversitario de ciencias exactas las cosas no han cambiado tanto, sigue el temor a los reportes y al subdirector de internado y siguen los uniformes llevándose de esa manera como solo un verdadero leninista sabe llevar.
Cuantos recuerdos, cuantas guardias, cuantas noches de StartCraft en el laboratorio de alto rendimiento de computación. Gracias escuela Lenin por darme tantas cosas, ten por seguro que nunca te voy a olvidar.
[...] con el transporte para llegar a la escuela y luego nos esperó una buena caminata (detalles en el blog de Julio). Para regresar tuvimos bastante más suerte (a pesar de que repetimos la caminata, pero esta vez [...]
ReplyDeleteJa, imagínate que diré yo que me gradué hace 7 años ... Ahora los aires acondicionados no se apagan, y en mi época te cogían con un calentador y te dejaban un fin sin salir :( Pero tranquilo, eso es parte de lo que dice Nassiry (también egresado de la lenin): mala leche ;-)
ReplyDeleteY es difícil encontrar a un PGI que no tenga un diente de oro (y todo lo que ello conlleva),,, no dejo de preguntarme ¿eso está sucediendo en la lenin? ... pero si sólo fuera en la lenin ... es todo el patio ... supongo que con un formateo y nuevo OS se arregle :)
happy blogging (cuando estaba en la facultad tampoco se blogueaba, por lo que veo han cambiado muchas cosas)
salu2
henry5
Desde que sali de La Lenin no he regresado nunca más , lo que si he escuchado son los rumores acerca de todas estas cosas lo cual es algo raro comparado con lo que teniamos alla cuando yo estaba ahi, imaginense que yo sali de ahi hace 6 años, ahora lo que no entiendo es que fue mi graduación la que se comió todas esas tribunas de elián para que otras generaciones vengan a disfrutar ahora sin sacrificar casi nada , mi graduación es la misma que la de cesar lage, recuerdo ahora todas esas marchas tribunas , cuanta nostalgia por esos momentos, felicidades a todos los que estan ahi ahora y no dejen caer nunca el nombre de esa escuela y no se dejen influenciar por los malos vicios de esos maestros emergentes, pues en mi epoca estuvieron los instructores de arte , claro que no es lo mismo un instructor de arte que un maestro emergente, pero al final no hicieron mella en nuestro comportamiento habitual , ojala tuviera tiempo y recursos para llegarme un dia de nuevo por alla, felicidades a a todos los leninianos jajajaja
ReplyDeleteYo en estos momentos estoy en la Lenin, soy de la generación 35 y es cierto es verdad que la escuela ha cambiado, nunca la vi antes pero ademas de que he tenido familia tambien en la escuela ingrese cuando estaba en proceso de construccion; la idea es que si yo fuera ustedes y de veras amara tanto a mi escuela como ustedes dicen pues estuviera muy contenta por los cambios y la manera en que ha mejorado, lo de los maestro emergentes y a es otra cosa pero de verdad que no estaria nada brava por lo bueno que le ha ocurrido a la escuela de mi vida. Aun no termino y a cada rato tengo unas ganas de que se acaben ya todos estos años, y en 10mo no queria estar aqui y como eso he pasado por muchas cosas, pero no cambio ni por nada ni por nadie, estos 2 y medio maravillosos años en la lenin, donde estoy segura que en ningun otro lugar habria vivido lo mismo.
ReplyDeleteMuchos saludos a todos los leninistas que lean esto y porque no tambien a los que no lo son, al fin de cuenta si queren se pueden integrar a esta gran familia que forma la lenin y seguira formando durante toda una eternidad, porque la lenin sera eterna, porque los leninistas no desapareceremos y siempre nos encargaremos de mantenerla en alto.
hola julio, descubrí por azar tu blog.
ReplyDelete¡cuánta computación! ... :-P
me quedo con las asignaturas extrañas que estudié yo y que no tienen apenas aplicación práctica, pero se me dan mejor.
yo a la lenin no he vuelto a ir. me hubiera gustado pero siempre lo pospuse y la verdad no me causaba gran ilusión hacerlo. lo mejor de esa época lo guardo conmigo, creo, lo que crecí, lo que me enseñó, algunos amigos y el olor de las plantas florecidas en las noches de más calor que nunca voy a olvidar, y que recuerdo con tristeza, sí, porque la lenin, en la que pasé tan buenos tiempos, me ha dejado sin embargo con el tiempo una gran tristeza, casi tristeza infantil de tarde lluviosa.
mi sobrina estudia ahí ahora, en la parte que es aún ipvce, y tampoco me agradan las cosas que me contó.
me gusta sin embargo mantenerme en la idea de que el tiempo mejor está por venir, sin deslucir a lo pasado, y también que uno lo decide, cuando es ese tiempo "mejor".
la universidad me sigue pareciendo la mejor época de las que he vivido, y es, de hecho, la que más añoro, y que continuaré en tierra extraña.
no más comentario al post, viva el tiempo de ahora, el tiempo de después. :-)